El brócoli es un vegetal versátil y saludable que puede prepararse de diversas maneras, resaltando su sabor y manteniendo sus nutrientes. La versatilidad del brócoli radica en su capacidad para adaptarse a diferentes preparaciones culinarias, su compatibilidad con una variedad de sabores y su capacidad para enriquecer una amplia gama de platos con sus beneficios nutricionales. Por ello, desde Grupo Lucas te dejamos algunas opciones para cocinar el brócoli que además de estar deliciosas, son sanas y muy sencillas.
Disfruta de las distintas formas de cocinar brócoli
- Brócoli al vapor. Cocinar al vapor es una excelente opción para mantener la textura crujiente y conservar los nutrientes del brócoli. Puedes usar una vaporera o simplemente una cacerola con agua hirviendo y un colador. Cocina el brócoli durante unos 5-7 minutos hasta que esté tierno pero aún firme. Ten en cuenta que el brócoli es un excelente acompañamiento para proteínas como pollo, pescado o tofu, así como para granos y pastas, lo que amplía aún más sus posibilidades culinarias.
- Asado al horno. El brócoli tiene una textura única que se presta tanto para cocinarlo al vapor y dejarlo crujiente como para suavizarlo al asarlo o hervirlo. Su sabor suave y ligeramente amargo complementa una variedad de ingredientes, permitiendo que sea utilizado tanto en platos salados como en opciones más dulces. Para asarlo, precalienta el horno a 200°C. Corta el brócoli en floretes y mézclalo con aceite de oliva, ajo picado, sal y pimienta. Extiende los trozos en una bandeja para hornear y ásalo durante 15-20 minutos hasta que los bordes estén dorados. Puedes añadir un toque de queso parmesano antes de servir.
- Salteado con ajo y jengibre. Calienta un poco de aceite en una sartén y saltea el brócoli con ajo y jengibre picados. Añade salsa de soja y un toque de miel para darle un sabor agridulce. Este método resalta los sabores asiáticos y le da un giro interesante al brócoli.
- Sopa de brócoli. Prepara una reconfortante sopa de brócoli. Cocina el brócoli en caldo de verduras con cebolla, ajo, zanahorias y apio. Después, tritura la mezcla hasta obtener una consistencia suave. Puedes agregar un poco de queso cheddar rallado antes de servir.
- Ensalada de brócoli. Haz una fresca ensalada de brócoli crudo. Corta el brócoli en pequeños trozos y mézclalo con uvas, nueces, queso feta y aderezo de yogur. Esta ensalada es colorida, deliciosa y llena de nutrientes. Además, en crudo también puede ser incorporado en batidos, smoothies o ensaladas para agregar un toque fresco y saludable.
- Brócoli gratinado. Cocina el brócoli al vapor y colócalo en una fuente para horno. Cubre con una mezcla de crema, queso cheddar rallado y pan rallado. Gratina en el horno hasta que la parte superior esté dorada y burbujeante. Este método le da un toque cremoso y sabroso al brócoli.
- Pizza de brócoli. Sorprende a tu paladar con una pizza de brócoli. Utiliza una base de coliflor para la masa y agrega brócoli, queso, tomate y tus ingredientes favoritos. Es una alternativa saludable y deliciosa a la pizza tradicional.
- Brócoli a la parrilla. Corta el brócoli en trozos grandes y ásalos en la parrilla con aceite de oliva, sal y pimienta. Esto le dará un sabor ahumado y una textura tierna pero con un toque crujiente.
Experimenta con estas diferentes formas de cocinar el brócoli para descubrir cuál es tu favorita. No solo estarás disfrutando de un plato delicioso, sino también aprovechando los beneficios que este nutritivo vegetal nos aporta. Desde Grupo Lucas esperamos que hayáis tomado nota ¡Contadnos si las probáis!